Desde el 26 de agosto, los aviones que aterrizar por la noche en la capital de España contaminan un 25% menos y gastan otro 25% menos gracias a los denominados "aterrizajes verdes".Cuando el avión se encuentra a 150 Km. de su destino (30 Km. menos que en los aterrizajes normales) comienza el descenso. Se apagan los motores y el descenso ocurre de manera continua (y no siguiendo escalones, lo que obliga al piloto a tener los motores encendidos). A 10 Km. de la pista, se encienden los motores y se aterriza con normalidad.
Podéis descargaros el gráfico aquí.
Antes de final de 2010 otros siete aeropuertos de la red de AENA –Alicante, Valencia, Barcelona Santiago de Compostela, Málaga, Palma de Mallorca y Gran Canaria.
Información en LaRazón.es
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