Uno de los motores de un B747-400 de Qantas explotó 45 minutos después de despegar causando un agujero en el fuselaje de la aeronave. El avión regreso a San Francisco, donde efectuó un aterrizaje de emergencia sus causar ningún daño personal.
El avión cubría la ruta San Francisco-Sidney con 230 personas, y en ese momento sobrevolaba el océano Pacífico.
"El hecho es que, ocasionalmente, los motores fallan en los aviones y, de hecho, esto prueba la habilidad de nuestros ingenieros y la tripulación que trajeron el avión a casa de forma segura", afirmó el portavoz de Qantas, David Epstein.
Os dejo un vídeo grabado por uno de los pasajeros:
Información en ADN.es
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