1 de julio de 2002. Un Tu-154 de Bashkirian Airlines, con 69 personas, viaja desde el aeropuerto de Moscú-Domodedovo hasta Barcelona. Por otro lado, un B757 carguero de DHL viaja desde Bahrain hasta Bruselas, con escala en Bérgamo (Milán); con los 2 tripulantes como únicos ocupantes. A 11.000 metros, ambos sobrevuelan la frontera germano-helvética (cerca del Lago Constanza), en una noche tranquila.La cola del DHL partió al Tupolev en dos. Los restos del avión ruso cayeron en un área de 40 kilómetros cuadrados, mientras, al avión carguero luchó durante dos minutos evitando estrellarse, pero no lo consiguió.
En las tareas de rescate participó, a pesar de las recomendaciones, Vitaly Kaloyev, arquitecto ruso que trabaja en la ciudad condal y que había perdido a su esposa y a sus hijos.
Skyguide, la empresa controladora, pidió perdón y decidió mantener el anonimato de los controladores de aquella fatídica noche; pero en la ceremonia del primer aniversario Vitaly consiguió sacarle la información al presidente Skyguide: Peter Nielsen.
El 24 de febrero de 2004, se dirigió a la casa de Nielsen en Zurich y dio varias puñaladas, falleciendo desangrado frente a su mujer e hijos.
Se le condenó a 8 años de cárcel, pero en 2007 fue liberado por error. Fue elegido Viceministro de Construcción en Osetia del Norte. Y cuando en 2008 estalló la guerra de Osetia, un periodista alemán le preguntó por qué lo hizo, y el respondió: "Si alguien me ataca, yo ataco de vuelta”.
Información en PabellónDelEnigma.blogspot.com
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