![](https://lh3.googleusercontent.com/blogger_img_proxy/AEn0k_tlFC-8sTTHnz59kR3tFHIGi7ETKf_o-V6f7aypivj9zCe7KTlHiywqkhbXhZ9k9P-V5GH1pNx4yfr8ZMXptgnhCvISQOrT6Ud1fIPTdst_DBWo3TJC4Da_0o_Y1Y6tnXSzccKWX5WuN3xGZSbLB1W92eL5=s0-d)
Per-Erik Jonsson (de 63 años) y su hijastra Billie Appleton (enfermera), ambos suecos, viajaban en un vuelo de Ryanair entre Inglaterra y Suecia. En pleno vuelo, Per-Erik sufre un infarto y la tripulación le ofrece un sándwich y un refresco. Cuando su hijastra consigue que vuelva a respirar, una de las auxiliares de vuelo se acerca y le entrega la factura.
Su familia ha denunciado la falta de atención por parte de la tripulación, y la aerolínea se defiende afirmando que la obligación de la tripulación es que cuando llegue al aeropuerto haya una ambulancia esperándole. Sin embargo, según afirma la familia, no había ninguna ambulancia a su llegada.
Información en ElEconomista.es
No hay comentarios:
Publicar un comentario